Cero

Escribir, para mi, es demasiado difícil. Insisto terca y dolorosamente.

Por muchos años he guardado celosamente mis reflexiones sobre fotografía y sobre cómo vivimos en estos tiempos, a partir de imágenes. Algo de estos textos se ha filtrado en mi producción académica, en algún número de PlaPF o en uno u otro texto de sala.

Eso es justamente lo que quiero cambiar con este blog. Abrir la puerta a que los textos que me atraviesan puedan encontrar otras formas de ser leidos y vividos, y tal vez estimularnos a interactuar con las imágenes de formas un poco más conscientes y propositadas.

Tal vez no haya nada nuevo aquí. Tengo siempre la angustiosa sensación de que nada nuevo puede hacerse/escribirse. O no por mi, por lo menos. Decido conscientemente ignorar, por ahora, este hecho, para atreverme a compartir. No por nuevo, no por “único”, sino por necesario. La necesidad de pensar. Y de no hacerlo sola.

Ofrezco entonces una escritura tercamente humana en tiempos de bots y generadores compulsivos de basura que inundan internet con pequeñas e inútiles dosis de “información”, o “tips”.

Si llegaste hasta aquí, muchas gracias.

Nos leemos pronto, espero,

Constanza.